En la segunda parte el juego se igualó y marcó Marcelino para adelantar 2-1 a los maños, pero poco después marcó gol Guillot y fue anulado, y más tarde el mismo futbolista fue objeto de penalti pero no se señaló. Se adelantaron los aragoneses con gol de Villa, en posible fuera de juego, y empató Urtiaga antes del descanso, con el Valencia dominando el partido. Se disputó a partido único el 24 de junio en el Camp Nou y fue posiblemente la final con el arbitraje más polémico sufrido por el Valencia, obra del portugués Joaquim Fernandes de Campos.