Los fabricantes de productos relacionados con el deporte registrados en la ciudad, según cifras de la aduana, vendieron 514 millones de euros en artículos para el Mundial de enero a septiembre de este año. Un laberinto de cuatro millones de metros cuadrados distribuidos en cinco bloques y con 75.000 tiendas que venden dos millones de todo tipo de productos. La Asociación de fabricantes calcula que el 70% de toda la parafernalia que se vende estos días en Qatar ha salido de Yiwu, una urbe de poco más de un millón de habitantes, a 300 kilómetros de Shanghai, que hace años fue absorbida por la madre de todos los bazares chinos: Futian, el mercado mayorista de productos básicos más grande del mundo.