Todo ello sin decir nunca una palabra más alta que la otra, con un liderazgo silencioso en el vestuario que no cuestiona ningún compañero ni oculta el cuerpo técnico. Los jugadores del Barcelona saltaron al campo con una camiseta de ánimo a su compañero Aleix Vidal, lesionado para los próximos cinco meses. Quedó así inaugurada …